lunes, 28 de julio de 2008

PREPARANDO EL CIERRE DE CAMINANDOCUENTOS


AMIGOS DEL CORAZÓN... eso son a esta altura...
Faltando la última parte de esta maravillosa experiencia, y teniendo la gran satisfacción de saber que "el primer paso" estuvo dado, quiero contarles, como siempre hago, que se está armando el cierre de Caminandocuentos.
El mismo, como lo indicaba la ruta original, será en la localidad de Villa Berna provincia de Córdoba, y la fecha definitiva, el fin de semana del 15 y 16 de Noviembre de este año. Habrá, cuentos, narradores, príncipes, princesas, brujas..., hadas, sapos encantados, elixires, y casas de chocolate.
Este es sólo un aviso, en breve recibirán las invitaciones correspondientes y esperamos que los que puedan... SE VENGAN!!!

lunes, 21 de julio de 2008

viernes, 11 de julio de 2008

"LOS MIGGONI, EN PLENO"




Una familia muy normal...
Una imagen vale más que mil palabras...
Y tres... ni les cuento !!!
Un placer compartir su lindísima locura por la vida.

OTRA VEZ EN CONCORDIA!!!





Presta a tomarme un descansito, obligada por las vacaciones de invierno, que hicieron que "no haya nadie en casa"..., entonces haciendo caso a la necesidad de todo un país que decidió salir de vacaciones... vacaciones??, cuando esta narradora iba a visitarlos... hice esta segunda parada técnica, y pensé que lo bueno sería volver a la tierra de todos los verdes... Entre Ríos.
Allí me esperaba la familia Miggoni en pleno!!!
Gaby, Luna, Ada, Andrés, Vicky, Carlos, Paula y Tato.
Otra vez, en la Biblioteca Popular Carlos Reyes Miggoni, conté cuentos y hubo panes!!!
No me creen??
Ahí estoy amasando...
Además, invitada por la Biblioteca y la Departamental de Educación de Concordia, ofrecí un taller para docentes y bibliotecarios, sobre el oficio del narrador.
Todos felices!!
Y yo también, desde el fondo y observando...

Gracias otra vez, amigos del corazón...

SAN JUAN, UNA LUZ PARA ESTA NARRADORA...


Todo el país, fue lo que imaginaba... ilusión y desilusión, esperanza y dolor, amistad con vino y empanadas..., un camino que todo argentino debería caminar, para comprender lo diferente que es todo más allá de la Plaza de Mayo.
Todo el país, fue algo particular.
Cada sonrisa, cada nuevo amigo, cada agradecimiento.
Pero San Juan me sacudió el corazón...
Hace veinticinco años la visité por primera vez, en aquel momento, tanto San Juan, su capital, como Calingasta, fueron una bocanada de "despertar". Lamento no poder explicarles más, porque aún es difícil para mí, comprenderlo.

Para hacer una especie de intento de acercamiento a esa comprensión, van dos notas; la primera, de una maravillosa dama sanjuanina, que deseaba conocer, después de haber leído uno de sus libros... "Sabores de la memoria" de Hebe Almeida de Gargiulo. De la introducción de ese libro, algo que tal vez me recordó otra vida, o algo atemporal, de ésta... "Una típica arquitectura lugareña definía los ambientes: acequia rumorosa bordeada de ojos de gringo y madreselvas; un puentecito de palos y barro para acceder a la vereda de tierra; la puerta de calle, el amplio zaguán que terminaba en la cancel de prolijos vidrios esmerilados y tallas señoriales y, atravesándola, la galería poblada de plantas, pájaros, enredaderas y perfumes.

...la despensa rebosante de conservas caseras, tabletas, dulce de membrillo en panes dorados, higos secos, pasas dulcísimas y orejones... y la cocina. Aquí quería llegar, pero debo señalar que la cocina se ubicaba justo en el límite entre el patio y el "traspatio". Este último era el lugar preferido por los niños por muchas y valiosas razones: Un sauce llorón descolgaba sus ramas sobre el antiguo mesón en el que se preparaban todas las delicadezas culinarias, y en el que comían las criadas y el peón "del sitio"; además desde las sillas de totora, bajitas y cómodas, escuchábamos mil historias que nos enriquecían y atemorizaban. Era el lugar del encantamiento"...


Después de haber conocido a esta bella mujer, en todo sentido...; de la mano de otros sanjuaninos, Guillermo, desde el regalo, y Marcelo, desde su voz, me abrieron el pecho con los versos de Leonidas Escudero, poeta, vecino de esos pagos... con su "Leña de cuerno de cabra". Algo de entre sus palabras, me hizo sentir que en San Juan, se siente así:


Yo soy en la cordillera,

leña de cuerno de cabra.

Doy fuego que no se apaga,

en brazos de la tormenta.

Buscame bajo las piedras

y hallarás mi corazón,

que siendo puro dolor,

ha de alumbrar tu camino.

Porque yo soy como soy,

y vivo amando escondido...


Todo lo respiré allí, en San Juan, lo soñé antes, lo viví después... y lo añoro, desde siempre...


sábado, 5 de julio de 2008

AMIGOS SANJUANINOS...







Guillermo, Miriam y Anita, me recibieron en su casa de San Juan y ellos fueron quiénes me hicieron sentirla...

Estos angelitos, son los que me cobijaron en su ciudad.
Allí, fundamentalmente, conocí gente que "me alimentó"... con esto que siempre pregono... TODO PUEDE HACERSE, allí lo ví día a día.

El viaje de Jachal a la capital sanjuanina, fue "un viaje"..., las montañas al atardecer, cosa que ya había comprobado en "mis" montañas, son lo más bello y reparador que pueda existir... "hay montañas redondas, dulces, y serenas, como las mías... y hay montañas, fuertes, estóicas y altivas, como las tuyas"...

Podría decirse que San Juan fue "conocer y comprender"; conocer a mis pares, a quienes hacen lo que ansío; y comprender,... cómo hacerlo.

Conocí a escritores, como Hebe Almeida de Gargiulo, lindísima mujer de quién algo había leído, y ahí dejé mi sugerencia..., que algún sanjuanino, escriba sobre ella, por favor!!. Eduardo Albornos, joven escritor de 21 años que acaba de ganar el Primer premio de narrativa y poesía en Trenque Lauquen, con su cuento: "Ceremonia"... delicioso. (ya se los contaré... a esperar).

Conocí a un cantor huaqueño, de dulcísima voz... Marcelo Caballero, con la particular sencillez e inmensidad de las tonadas cuyanas.

Conocí a Rodrigo y Natalia de el centro cultural El Barro, con su cotidiana tarea de educar y amar a tantos niños y jovenes de uno de los barrios de San Juan. Igual que Guillermo, Mayra y Santiago del barrio El abanico con su lugarcito cálido junto a las montañas, El Retamo...

Y Conocí a Adriana y Ozzi, un hada y un dragón, apoderándose de cada rincón dejado en el olvido, poniéndole corazón, color y dulzura, para seguir educando a todos los que... algunos dicen... "para que tirar flores a los chanchos...", por suerte, ellos no ven chanchos, y sí, tiran flores...




MOLINO HARINERO GARCIA







La frutilla de la torta de este gran viaje, fue "para mi alma panadera", la visita al Molino Harinero García en Jachal.


Llegamos el día que llegó el agua, ya que el acceso al agua es manejado por Hidráulica de la provincia, así que con gran alegría y una sonrisa enorme, nos recibió Lucio Mellea, trabajador y guía del Molino, quién nos contó con un gran amor e ilusión cómo hace cinco años se pudo volver a poner en funcionamiento aquel Molino que él había conocido de niño, en su época de esplendor.


Esta zona triguera, poseía 5 molinos, que hoy están tratando de recuperarse, aunque sea para el turísmo.


La fuerza del agua mueve la gran rueda que da movimiento a todo un engranaje de poleas y con cada una de ellas, se pone en funcionamiento una parte de esta obra artesanal y perfecta.


Lucio nos contaba que en aquella época de esplendor, el Molino, no sólo producía harina; además tenían gallinas y con su producción de huevos, hacían unos riquísimos tallarines caseros. También otra polea, movida desde la misma fuerza originada por la rueda inicial, se accionaba un fuelle, que servía para una herrería, que había fabricado todos los herrajes del molino.


Por supuesto, me llevé un poco de harina... EXQUISITA y única!! que disfrutaron, luego mis amigos en San Juan, con los pancitos que ven en las fotos...




Un lugar mágico, indudablemente!!






SAN JOSÉ DE JACHAL, SAN JUAN





La República de Jachal, según la definiera el Profesor José Casas, mi anfitrión, es un bello y sereno lugar del norte de San Juan, casi recostado sobre las montañas.

Allí fuímos invitados por él a la Biblioteca Popular Sarmiento, donde después de presentar su libro, hice una contada para los presentes.

Ahí conocí a Elías, un niñito de 6 años que lee desde muy pequeño y es un apasionado por aprender. El nos regaló antes de empezar, la poesía "El jachallerito", bajo promesa de regalarle un libro!!


Al día siguiente, estuve de fiesta: con la escuela Alejandro Fleming de la zona de "La gran china" en las afueras de Jachal, y en la José Marmol, en Pampa Vieja.

En la primera, vimos sus producciones artesanales (que se realizan con la colaboración de los papás), y probamos sus carramelos de membrillo!!!

En la José Marmol, después de los cuentos, los chicos nos bailaron una chacarera!!


Todo bajo un calentito sol jachallero...