viernes, 30 de mayo de 2008

ME TOMO CINCO MINUTOS...



Como diría el papá de "la bruja" Bibiche... hay que aprender a sortear las piedras... y ver las flores del camino.

Hasta ahora, siempre les participé lo ocurrido, por eso, quiero contarles, que me tomaré unos días por un serio insidente ocurrido en mi casa.
Retomaré la ruta, posiblemente, desde el 14 de junio en Salta. Hago este alto en la huella, que me permitirá respirar profundo y mirar para atrás.
He trabajado mucho para que Caminandocuentos naciera. No estuve nunca sola, desde el primer "sí" de Lautaro y Juan, me sentí apoyada por muchos. Primero mi familia, que acostumbrada a mi nomadísmo, aceptó con una mezcla de naturalidad y resignación el proyecto. Después, por mis amigos, que aconsejaron, acompañaron, y trabajaron. Finalmente, por cada uno de mis anfitriones, en pueblos, ciudades y parajes.
Sin duda, la realidad más dura y común, fue comprobar kilometro a kilometro lo alejado que están los dirigentes del pueblo.
En todos lados es igual. No importa cuan grande o chico sea el punto en el mapa, las historias se parecen, las luchas se pelean, y los oídos... siguen tapados.
Los hacheros del norte de Santiago, los tareferos de misiones o los maestros de Barranqueras, son igual de argentinos que quienes nos gobiernan, pero también son, más patria, que lo que ocurre en sus despachos.
El camino está adelante y volveré enseguida; y lo haré sobre todo buscando a más Gabrielas, Adrianas, Gracielas, Marisas, Milagros, Marcelas, Verónicas, Julietas, Davides, Andreses, Lunas y Adas, Abuelos Miggoni, Lauras, Oscares, Pedros, Ineses, Sergios, Elenas, Doras, Monicas, Francos y Encarnaciones, Ramones, Mirtas, Wendys, Juanes, Nellys, Rositas, Violetas, Evas, Reggies, Rubenes, Julios, Blancas, Myriames, Claudias, Tonys, Marios, Marinas, Luises, Carlos, Vickys, Paulas, Tatos, Raqueles, Domingos, Williams...
que en definitiva... son lo único que importa.


Si me dijeran pide un deseo,
preferiría un rabo de nube,
que se llevara lo feo
y nos dejara el querube.
Un barredor de tristezas,
un aguacero en venganza
que cuando escampe parezca
nuestra esperanza.

sí, del poeta Silvio Rodríguez...

3 comentarios:

Anónimo dijo...

ME HICISTE LLORAR CON EL ULTIMO ESCRITO... PERO ES ASI... EN CADA LUGAR, EN CADA PUEBLO HAY HERMOSAS GENTES CON LAS MISMAS HISTORIAS... TE QUEREMOS MUCHO... ADELANTE Y MERDE EN FRANCES!!! Y COMO DECIMOS ACA, LOS ARTISTAS ARGENTINOS: MUCHAS MIERDA !!!
GABI, FLIA. Y LA COFRADIA DEL POZO

Anónimo dijo...

QUE LO DE TU FAMILIA Y EL PROBLEMA SERIO SOLO SEA UNA ANÉCDOTA EN ESTOS DIAS...Y EL MIEDO, ESA SOMBRA, SE PINTE DE NUEVO DE ILUSIONES Y IONES DE LUZ..A FIN DE QUE OTROS EN OTROS LARES TE SEPAN UN CUENTO ALEGRE PARA EL ALMA. VICKY DE CONCORDIA

E dijo...

A pesar de la triste realidad, están esas voces que ya al ser escuchadas se embriagan en una nueva oportunidad de esperanza y dignidad...
Es muy importante y valorable lo que estás haciendo, fuerza!!
Estoy siempre
Nati